SOBRE MI
Naces… Creces… Te reproduces… Mueres.
Un ser humano promedio puede llegar a vivir hasta 82 años… Lo cual equivale a 29.900 días… Unas 717. 600hrs, en definitiva, hay tiempo suficiente para hacer muchas cosas más que solo la típica «checklist» a la cual muchos suelen apegarse.
Lo sé, no me he presentado. En caso de nunca hallamos cruzado palabras, hola; mi nombre es Angel, tengo 15 años y vivo en Caracas… Venezuela.
Hablar de mi… Trabajo costoso. Suelo ser del tipo de personas que tienen una imaginación tan grande y extensa que muy pocas veces detienen a pensar en sí mismas… Por lo cual cosas como estas se me hacen un poco difíciles.
En general, no hay mucho que decir de mi. Vivo con mis dos padres y tengo una hermana 4 o 5 años menor que yo (realmente nunca llegué a comprender la brecha entre «Tory» y yo). Estudio 4to año y fuera de eso no hay mayores diferencias… Soy «una más del montón»… Pero a nadie le interesa saber de la misma banalidad que todos están condenados a vivir, al menos, sus primeros 17 años de vida, prefiero hablar de cosas más interesantes.
Música. Artes. Literatura.
Esto mueve mi día a día; gracias a esas tres palabras mi vida tiene sentido hasta cierto punto.
Alguna vez escuché a alguien decir que la música era la mejor medicina de todas; que era como oxígeno, no puedes vivir sin ello… Y jamás en mi vida he estado tan de acuerdo con alguien. Gracias a la música he gritado hasta quedarme sin voz tres días, llorado hasta dormirme, bailado para matar el tiempo y disfrutar; gracias a la música me he reído, he marcado los mejores momentos de mi vida y los peores también… Conciertos, despedidas, fin de año, mi cumpleaños, hasta mis mejores amigos están calificados con alguna canción y la mayoría lo sabe… Creo que, para mi, la música es algo obsesiva. Realmente son muy pocos los momentos en los cuales no estoy escuchando, tarareando o «tocando» alguna canción; es algo que simplemente me mueve… Se ha vuelto mi propio oxígeno.
Y siguiendo en la misma línea, las artes también forman parte importante de mi vida. Cuando la mayoría de tus recuerdos incluyen galerías y museos, poco a poco esos «10mins» pasan a ser 30, y de 30 pasan a ser 2hrs… Hasta que llegamos al punto tal en el que una tarde dentro de una galería no se me hace incómodo en lo absoluto.En los bajos mundos comentan que «del arte no se vive»… Puedo asegurar con la frente en alto y con una sonrisa que aquello es completamente falso… Por lo cual nunca me he detenido a disfrutar de esto.
Y por último, pero no menos importante, la literatura. La primera vez que leí un libro por gusto, si no me equivoco, fue a mis 9 años. Era mi cumpleaños y se me había ocurrido la idea de hacer un día de SPA (diva? Donde?) recuerdo que solo fuimos 10 amigas… Y a la hora de abrir los regalos hubo uno que me llamó la atención. «Percy Jackson y el Mar de los Mounstros. Elaborado por: Rick Riordan» Gracias al «Tío Rick» encontré una de mis actividades favoritas. Recuerdo que ese libro tenía unas 250pags y me tomó un par de meses acabarlo… Hoy día en dos meses puedo llegar a leer unos 3 libros de más de 500pags… Sin duda leer es uno de los mejores oficios que he encontrado en mucho tiempo. ¿Que algunos lo consideran aburrido? La verdad no me importa ¿Que soy una rata de biblioteca? No, no lo soy ¿Que leo porque soy pobre y no tengo dinero suficiente para ir al cine y ver la película? Realmente no me gusta ver TV en general…
Y, como toda lectora imaginativa e impulsiva, es obvio que la escritura también forma parte de mi día a día. «Houston» (Mejor conocido como Ricardo, mi papá) comenta que cuando era pequeña llevaba una libreta de lado a lado, en la cual escribía cualquier cantidad de historias o de ideas… Hoy llego a escribir más de 1500 palabras al día. Mares y mares de letras dedicadas exclusivamente a desarrollar aquello que tanto me apasiona y me hace «drenar» cuando tengo un mal día y me hace plasmar los buenos con botones de oro.
Que a qué quiero dedicarme en el futuro? La verdad no lo sé.
Una parte de me lleva a dedicarme a las leyes, educación y política, a alzar la voz y defender a aquellos que no pueden dar la cara por si mismos, a enseñar y formar una generación futura con las mejores bases posibles… Pero otra parte de mi ruega y me jala «al otro lado de la talanquera» hacia las artes, la comunicación, a simplemente dejar mi marca en el mundo a mi manera. Aunque todavía tengo tiempo para pensarlo, decidí que jamás en mi vida usaría vestidos, tacones y maquillaje para limitar mi vida a una oficina… Quiero simplemente disfrutar de lo fantástico y grande que es el mundo, y que en cada sitio al que vaya deje mi «marca registrada» y demuestre la veracidad de una las frases con más razón que han salido de la boca del propietario «De jeans y aviones vive el hombre».
¿Datos curiosos?: no me gusta la música en español, amo las luces de neon y la escarcha, adoro todo lo relacionado con política y educación (aunque suelo discrepar en muchos aspectos con la última) y no me gustan los tomates ni el sushi.
En conclusión: se podría decir que soy algo rara… Pero, como suele comentar «mi tribu»: ¿Raro?, ¡No!, solo soy edición limitada 🙂